¡Decencia en la feria santafesina!

Por Lux Lindner

Dibujo por Marcelo Pombo

VIERNES

En camino a la Feria de Arte de Santa Fe, ciudad que desconozco por completo. Voy a dar un taller de edición de imagen/texto pero sobre todo me toca representar, a falta de alguien mejor calificado, al Flasherito. Gran parte de la plana mayor de nuestro house organ se encuentra en alguno de los países serios (¡digamos Francia esta vez!). Así que tomo el periplo que se me ofrece como oportunidad de hacer un poco de “vida federal”, salir del agudo-panzudo-embudo de legitimación eternamente configurado para que Buenos Aires y Rosario puedan quedarse con todo el crédito de lo que pasa en el Arte Contemporáneo de Churraskilandia, mas allá de ese esforzado intento de contrapeso que pudiera venir asomando desde Tucumán…

Para el viaje me llevo cuadernos de notas y en soporte papel un solitario volumen; Bajar Es Lo Peor, primeriza novela juvenil de Mariana Enríquez que ha dividido a mis asesores literarios; para algunxs es un libro insolayable al que te abrazás en la cama, para otrxs no es más que “aquel bluff de ese invento”. ¡Tal vez ambas partes tengan razón! En lo que mi respecta siendo las 10:29 no se si estoy en Tigre, Escobar o Campana pero he llegado a la pág. 80 de la novela y cabeceo de aburrimiento. No puedo creer que una trama tan adobada con taxi boys, vampiros marinados en aceite  y drogas pesadas, que leo con el viento a favor de una posible nostalgia hacia la época descripta, resulte tan aburrida. Tal vez faltan aquí  ilustraciones o un rompecabezas plegable ! Sigo participando…

De vez en cuando ráfagas de data del mundo exterior atacan a mi novísimo celular interfiriendo la propensión al devaneo estetizante atemporal. El crimen de Strzizowski en Chaco, otro lugar de patria  que conozco tan mal, se vuelve algo omnipresente. Me da cosa pensar en si hay territorios signados por la fatalidad donde la pulsión emancipatoria es fagocitada con letal diligencia por los aparatos partidarios y lo único que puede hacerse es cambiar la corbata a un feudalismo atávico que nos sobrevivirá a todos. ¡Ay, que qué feo argumentar así, como pariente antipático que pega puñetazos sobre la mesa de hule cuadriculado …! ¡Feísimo Luisín!

Debo decir que la cámara de mi nuevo aparatejo es tan buena que he de cuidarme si no quiero amanecer autoescrachado.

Abandonados por ahora a su suerte los drogones en soporte papel de siglo 20, leo en pantallita un salpicado de antiguos nùmeros del Flasherito como para “empaparme de contenidostratados y tratables ”. – Museo del Vòmito- Fanzines Repentistas.- Cuadros robadospara comprar armas en Taiwan -. El Coronavirus un Hiperobjeto ?- Los paises serios solo te dejan hablar de tus pobres, arte tonto ya tienen (buscar al autor de esta frase…)

Todavía no sé a qué precio se venderá cada ejemplar; mando mensajes a los poderes responsables. Y ya no se ve nada urbanizado desde las ventanillas de ómnibus….

Media tarde. Llegando a ciudad Santa Fe. Escaldado por el cinturón de miseria que uno está forzado a atravesar cuando llega a Rosario me sorprende para bien la muy decente transición que hay aquí de zona rural a zona urbanizada. Decencia es palabra que parece sentarle a Santa Fe… ¡vamos a ver por cuánto tiempo!.

Dejo las valijas en el hotel en un rush, me cambio la ropa, entro en modo artistejo bermellón. Llego a la Feria en la antigua Estación Belgrano, edificio imponente y anónimo al  que le confiscaron las vías. Queda ahora una caja de cuádruple altura con modulaciones texturadas historizables sin rastro de genio arquitectónico pero eso sí….decencia (ja!).

Al principio me confundo la Feria de Arte  con otra de artesanos que ocupa el enorme hall central de la estación . Los artesanos disfrutan de iluminación a la carta, señalética más prepotentti y por las dudas camión con parlantes para hacerse autobombo. Contraste con cierta confidencialidad casi culposa de la Feria de Arte.

(He notado de paso que la gráfica política local tiene su personalidad, los jetones vienen mucho más retocados que en Baires, como preparándose  para estar a la intemperie durante meses o años…)

Ya en pleno Contemporary Art World y primer piso me consagro a firmar variados documentos contractuales sin mirarlos casi mientras me reciben autoridades en racimo con predominio de Cecilia Sosa, parte del comité organizador y además artista en actividad con obras exponiéndose en la feria .

Cecilia me muestra en nuestro primer y apresurado paneo ferial varios de sus dibujos y objetos con sugerentes alusiones esotéricas . ¿Utilería de alguna misa paralela? Amenaza con vender varios trabajos en las horas que siguen, lo que me llena de optimismo en relación a un público todavía misterioso. La verdad que me falta neuromasticar bocha, toca ahora instalar kiosco flasheritico a tout velocitè, la feria está recibiendo gente….

El sector “editorial” de la feria es conciso . ¡Dos mesas! Me asignan una a cotè de Lucas Mercado de Editorial Azogue. Amén de editor , Lucas tiene también obra pictórica ( ¿comic-fauve?- ¿surrealèsimo pop condensándose?) colgada  en la feria. Intercambiamos libros (he traído algún que otro ejemplar de mi Argentinistica, en gesto de rara lucidez) .

Al valiente pùblico nativo que empieza a acercarse le gusta decir “pero claro que conozco al Flasherito». Despliego ejemplares sobre la superficie en modo frenético , como para fomentar desde las tapas que el entintado de Muriel Bellini haga eclosionar sin demora larvas mecanocàrnicas sobre la blanca tabla de transacción .

Epa, cuánto aplausos llegando a mi oreja izquierda!! Se están dando premios no lejos de donde estoy, pero no llego a decodificar nombres, apenas algún que otro jurado. Ya veo qué poco tendré para decir de las ecuaciones de poder/ guita en este evento.

Noche en una terraza ventosa, great DJ work, picturas de ácido colorido sin nombre como una Agus Letal resquebajada y muchos nombres nuevos.

Stand de Satélite con obra de Diego Gelatti y Florencia Palacios. La obra de Palacios recibió el premio del Museo Municipal de Artes Visuales Sor Josefa Díaz y Clucellas de Santa Fe
Agustina Miñones, Delta espacio (Santa Fe)

SÁBADO

Desayuno algo acelerado en el hotel Ambit. El ascensor parece el teletransportador de la película La Mosca  por lo que procuro usarlo lo menos posible.

Hoy tenemos recorrido en omnibus por la ciudad de Santa Fe y se sale de la estación Belgrano. Viento frío al llegar al meeting point . En el bus los expedicionarios nos sentamos juntos, salvo las señoras de Belleza Y Felicidad Fiorito, que se van atrás de todo y lanzan miradas hoscas. Las iba a acompañar Fernanda Laguna, pero algo le pasó, no se qué, y no vendrá Fernanda. 

Primera parada, Museo Sor Josefa Clucellas, en plena peatonal. Josefa Clucellas, una religiosa, habría sido la primera mujer que tuvo firma en sus cuadros en territorio nacional. ¡Y todavía no he visto nada de ella! En la sala principal del museo exponen dos artistas vivos ; Malcon D Stefano y Rosa Renk. D Stefano trabaja dibujos de gran formato trazados con papel carbónico que (me atrevo a decir) tematizan nuestra capacidad de proyección sobre esos monumentos semiabandonados, que vemos todo el tiempo pero soportan un doble descrédito morfológico y político (si se quiere sintáctico y semántico!). ¿Pero y si los monumentos mismos proyectaran expectativa sobre nosotros? En D`Stefano el trabajo de línea descriptiva es lento, concentrado, nada farolero. Vuelve a aparecer en mi cabezota la palabra “decencia“.

Rosa Renk es otra generación, bastante anterior,  grabadora multipremiada de larga trayectoria que desde una vida de reclusión entrega una obra cohesiva dentro de su variabilidad que alude a la relación de la mujer con la tecnología. Muy buena dosificación del color, como de melancólica calidez, precisión de la gama cromática harto ponderable dado que en el grabado argentino el color es la variable siempre lista a tirarte abajo y con estrépito el mejor plan

Segunda parada /Escuela Mantovani; los alumnos trabajan con particular seriedad contenidista el acompañamiento textual de su trabajos. ¡Ni ironía ni saraza! ¡Definitivamente esto no es Buenos Aires o Rosario! 

Tercera  parada/ Museo Richard Pautasso, en rigor se trata del  entrepiso en una casa de venta de ropa más bien lujosa. Es emprendimiento extraoficial, desde una piedad familiar que oscila entre tolerancia y comprensión, para una figura excéntrica que amerita quizás un ulterior contextuar más cabezudo. Pautasso era hombre de la noche gay, sus dibujos tienen algo de un Tom of Finland retrazado con mano diestra y biromes de color imposible (verde, naranja). Cuando se escriba una Enciclopedia del Arte Gay en Churraskilandia (tema pendiente!) Pautasso tiene lugar asegurado! Pero claro, tiene que aparecer el enciclopedista a cargo de la investigueta.

…Como mìnimo habría que hablar con Charlie Herrera, sospecho

De vuelta en  el stand de la Feria. El Flasherito se vende a 500 muchipesotes la unidad con oferta de 2 x 700…. y los ejemplares vuelan! Poco tiempo aún para ver las galerías y llegar a un atisbo de apreciación sobre la producción local , a la que de todas maneras puedo juzgar como un soldado juzgaría a otro, no mucho más …

Entre las primeras cosas que me llaman la atención, en un cercano pasillo , hay remix de piezas históricas y actuales que armó Violeta Mansilla, antigua vecina de UV en Villa Crespo ,con obras de patrimonio local. Siempre es bueno cruzarse un Juan Grela (del período que sea) en modo presencial…

Acá me dicen que UV se mudó a Santa Fe, parece que está en un próximo recorrido…

After de la feria. Se supone que hay fiesta después del cierre. Vamos hasta un lugar llamado La Morena , otrora cine que alberga visibles vestigios ( proyectores, carretes) de tal periclitada función. Eah, ¿estoy acaso viendo a un jurado de los premios, el porteñisimo Hernan Worthalter de espaldas, whisky en mano? Empiezan a inundar La Morena artistejos , curadores y avanzadillas del público sensible. Lo que no aparece es el morfi, aunque esté pautado cierto menú para los feriantes. La atención a nuestros estómagos se desvanece.  Con Cecilia y antiguo amigo suyo que estudia cine experimental en Milwaukee (y recomienda a unos tailandeses impronunciables) mudamos nuestra múltiple ansiedad a Pizza Mutante. En la nueva locación adecuados murales enmarcan la llegada de salvadores hidratos. Larga y ruidosa  conversación sobre variedades de pizza y estupefacientes. Aprovecho para despotricar contra Enriquez y sus junkies de papel glacé. Contraste del periodismo con la lebendige Erfahrung? Peligros del querible fumo, limitaciones de la Helada Serenidad, que ni abre ni dicta, sólo puede subrayar. Averiguo que es un “liso “ (medida pequeña de cerveza, que se se sirve en vaso liso, de ahí el nombre viste? ). Santa Fe es ciudad cervecera por excelencia ( 80 l por cabeza de  consumo anual).

Volvemos a La Morocha donde tocan dos bandas. Ambas luchan con un sonido horrible. La primera, dúo de Mendoza, me gusta más. Trabajan esa cepa de música semi–hablada que tanto gusta ahora pero creo detectar al menos algún trabajo sobre el sonido mismo. Vienen después los de Rosario, mucho ímpetu,  más escenografía, vocación de agitprop y consignas a favor del orgasmo anal, aunque la música per se me antoja de lo más normalota. Y sí, soy un progresivo incurable!! Me viene la fiaca, me despido, vuelvo caminando al hotel por una Avda Gálvez muy apropiadamente iluminada que me hace pensar en el tan sano modo que tiene la juventud local para festejar. Mastico y refuerzo mis reflexiones sobre el contraste entre ¨gangsterismo rosarino¨ versus “decencia santafesina” mientras se me cierran los ojos.

Obra de Guadalupe Carrizo, distinguida con el Premio In Situ, Fulana galería (Tafí viejo)
Obras de Nydia Andino y Andrés Dorigo en El baile

DOMINGO

Nuevo tour en colectivo. Teorías sobre el origen del nombre de esta ciudad, que se inundó 30 veces. Al primer cuadro pintado en esta ciudad se le atribuyen milagros (de sangrado y transpiración)

Primer parada Museo Rosa Galisteo . Edificio art deco autoritario,no voy a decir que no me gusta porque me encanta jaja! La rareza (¡rareza por lo positivo!) es que fue pensado como museo desde el vamos, no es usina reciclada…como el MNBA de Bayres sin ir más lejos. Y hete aquí que el Galisteo resulta ser el segundo museo de artes visuales del país en volumen patrimonial …mirá vó!! Legado insular y argentinocèntrico al que es imposible hacer justicia en pocas líneas.

Acá hay de todo, bueno y malo pero siempre informativo!! Me cruzo con unos Victoricas tremendos, creo que ese pobre hombre sufría más pintando una mujer desnuda que yo dibujando algún jugador de fútbol lamiendo en público su poronga vinculante de resina solarizada.

Aparecen los cuadros de Sor Josefa Clucellas. Nada, nada mal. ¡No todo en ella tiene que ver con santitxs!

¡Epa, un piano de cola, solito él! Mientras el grueso del cuerpo expedicionario se concentra en su segundo desayunar lanzo algunos desafiantes acordes épicomelancos. Estoy horriblemente inspirado, el escape tóxico en Gualeguay me dejó los pulmones a la miseria…

Se hace hora de rumbear para la version santafesina de UV. Expone Eugenia Suarez una artista formoseña de un registro sereno y sacral. Empiezo a atar cabos. Empiezo a armar un mapa que incluye Santa Fe y Paraná extendiendo tentáculos hacia el norte. Aplicación para un arte de pensierosidad  y contenidos, un arte que dispone de tiempo que no se recuesta tanto en queja, la ironía y la pirueta snob y está en una relación muy “Tú y Yo· con la Gran N …con la Naturaleza» dicho mal y pronto….

Visita grupal al Taller de Lali Martinez Spaggiari. Me llegan de ella al menos dos lineas muy netas de trabajo. Un dibujo detallado  con sabotajes al costumbrismo y por otro lado realizaciones exigentes e inquietante en cerámica. Noto que Lali usa mucho una palabra que he descubierto en Santa Fé; Localía

Ultimo dìa de feria. Vendiendo los ùltimos ejemplares del Flashe .

Cecilia vendió varias obras y está contenta, pero no sabe si seguirá con la onda “ocultística”. Por lo pronto sugiero que mire un poco por la lado de los de los sigilos y la Magia del Caos.

Con las manos libres puedo ver mejor la obra textil de Danela Arnaudo, cuya perfo no llegué a apreciar completa a pesar de fotografiarla de modo reiterado. Hay algo épico y crudo en sus tamaños y texturas que mi ignorancia tiende a posicionar lejos del “arte textil”!

Otra obra textil que me llama  atención es la ademàs muy gràfica de Guadalupe Carrizo, representada (me advierte Cecilia)  por una galería de Tafí del Valle. A partir de premisas relativamente “amables” como las “cinco pieles” del austrocharleta  Hundertwasser se las ingenia Carrizo para lanzar tremendos aunque nada solemnes comentario sobre agrotóxicos, deforestación y lindezas anexas que nuestros politicastros cabeza de zapallo y sus contadores patilludos  prefieren no ver.

Fin de la feria, aunque no de la barra de tragos. Toca una banda buenísima, que resulta ser … Diosque! Y hasta recuerdo la letra de Broncedado, ¡achalay!

El grupo expedicionario va a comer a a la Grieta unas empandas de pescado picante que se las traen y nuestra puntería en la microkermesse nos asegura algunos lisos extra.  

Obras de Nydia Andino en El baile, muestra curada por Inés Beninca en el marco de +Feria

LUNES

En el ómnibus de regreso resulto ser vecino de Diosque y sus secuaces (incluyendo al Asesino del Romance) y se forma animada charla sobre Burroughs, Cronenberg, Silvina Ocampo y, adivinen quién más…

Estaba seguro de encontrar en la estación terminal alguna memorabilia para llevar a Buenos Aires, para que me crean en el barrio que estuve aquí, para delirar al rosarino que venga a reírse de a palabra “decencia “. Pero pues nada de nada. Nadie del pueblo ha decidido sobre qué puede ser importante en esta ciudad. No soy el único que sospecha que nadie quizás acarició la cabecita de estos ladrillos apoyados en barro con ruedas . Habrá que tener charla muy seria con el encargado de turismo de esta ciudad… cuando se decidan a tener tal cosa…

Poco antes de llegar a Retiro, Facundo y Marval han Salido de la Temporalidad. Y la mujer que camina en cuatro patas tiene en su paladar la cabecita bigotuda de lord Byron, al que Armendariz  busca y buscará en cada veterinaria del siglo XX.

Crédito fotos: Sebastián Pachoud
Agradecimiento especial: Priscila Sandoval y Cecilia Sosa

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