El primer retrato de César Aira

Durante una charla de Jorge Luis Borges en los años sesenta, la anodina ciudad de Pringles acunó un prodigioso encuentro entre unos adolescentes César Aira y Arturo Carrera y un elusivo y misterioso pintor del pueblo: José Antonio Triano. La fugaz coincidencia dejó huellas en los escritores pringlenses, que Mariano Vespa rescata en este texto que vindica la figura del artista cautivo. Leer más