Plácido paréntesis

Por Cecilia Closa y Juane Odriozola

Dibujo por se.feli

Una vez nos disfrazamos de paréntesis para una de las fiestas que organiza Ale Ros. No ingresamos porque se nos pasó el horario 2×1 y no teníamos pensado quedarnos mucho (y en la entrada fueron inflexibles). Veníamos de un día super ajetreado al que le sumamos la locura de ponernos a cortar, pintar y pegar cartón. Cuando terminamos los disfraces, incluso, dudamos de si tenía sentido mandarnos. Pero salir a la calle de esa manera ya era algo. Tomamos el bondi y a pocas cuadras de La Confitería nos enteramos de que en realidad nos habíamos disfrazado de bananitas negras, o por lo menos así nos gritaban quienes querían hacerse una foto de sábado a la noche con nosotrxs. Sostuvimos la idea de paréntesis ubicando a lxs modelos en el medio. Dimos un poco de lástima en la puerta y nos perdimos en la noche dejando las bananitas colgadas de un carapantallas municipal.  Pusimos entre paréntesis una publicidad que solo podremos recordar si revisamos nuestro álbum de fotos. Por esa época ya habíamos sacado algunas se.feli en la calle pero aún no teníamos creado el perfil de Instagram donde publicarlas. Las fotos de esa noche nunca las mostramos. Su correlato textual de paréntesis  no solamente aclara algo del contexto, viene a hacer algo distinto. Manteniendo su función de pausa, nos invita por aquí a probar otra digresión cualquiera, como la de sacarse una selfie de turismo local,  con una frase de canción en español:

el ritmo de la vida me parece mal

hice brujería, pinché tu muñeco

tiempo de retorno, finjo malestar

quiero que me des tu aprobación o tu olvido

no busco aplausos, toco mi propio tambor

borracha está la puerta, cerraste y quedó abierta

todo el mundo saltando contento, porque allá afuera te espera el país

una aguja en un pajar es difícil de encontrar, pero más difícil debe ser si la buscás

el bien y el mal definen por penal

las momias de este amor

canción llévame lejos, donde nadie se acuerde de mi

a la carga mi rocanrol, desborda cualquier mar que contenga el gran vaso de tu cola de paja

Iluminada y eterna, enfurecida y tranquila

tanta pasión colgada, en la pared

hay que ser sutil, muy muy sutil, pero no hay que ser careta

amiga emo, amiga dónde estás, prometo no fallarte más, ven a la comida

Eulogia Tapia en La Poma

un amigo es una luz

Larrea esquina Sarmiento

cada vez que se aparece frente a mí tu anatomía

hoy es domingo, no hay compromisos con el reloj

a todo trapo relleno de duro, a todo trapo relleno de blando

todo lo que pueda arreglar hoy lo dejaré para mañana

¿qué es lo que hace un taxista construyendo una herida?

es verdad que soy una rata de ciudad, no tengo religión, tengo ansiedad

con agua bendita de tu fuente bésame toda la frente

vamos a punguearle a esta vida amarreta un ramo de sueños 

no las hemos de olvidar

qué difícil se me hace mantenerme con coraje lejos de la tranza y la prostitución

en los aleros de la mente con las chicharras

lo más lindo de un baño es entrar de un chapuzón, derretir impedimentos, la utopía infinita

mi ser te añora con frenesí

ve con él, que beba en su propia copa del veneno de tu piel 

en vez de maldecirte con justo encono en mis sueños te colmo de bendiciones

soy el que nunca aprendió desde que nació cómo debe vivir el humano

algo me late y no es mi corazón

¿a qué dedica el tiempo libre? 

*Editora invitada, Marcela Sinclair