¿Por qué insistir en la fotografía?
por Julieta Christofilakis y Mariana Papagni
dibujos por Lucas DiPascuale
J: Hola Mar! ¿Cómo andas? Qué lindo escribirte.
Siento que los mails en estos meses de cuarentena y aislamiento son lo más cercano a un diálogo, ahora entiendo por qué la gente se mandaba cartas en el pasado. Te escribo para contarte que voy a escribir una nota para El Flasherito en el marco del lanzamiento de Revista Balam: Mestizx (estoy muy ansiosa de que me llegue la revista y poder ver tus fotos ahí). Le hice unas preguntas a Luis Juárez, el editor y creador de la revista, y me dispararon un montón de cosas.
En primer lugar me parece increíble que en un contexto de pandemia el papel siga estando tan presente, creo que nunca vi tanta oferta de libros, fotos y revistas como ahora (por ahí es que yo no estaba nada atenta antes pero siento que nos estamos «reinventando» un poco ¿Qué opinas?). Insistir en la fotografía como arte y salir de las redes sociales me parece muy valiente en estos tiempos.
Siento que la foto estuvo y está -aunque cada vez menos- muy pegada a lo documental, al registro, a la «verdad» y me pone re contenta que esto se vaya destruyendo de a poquito pero ahora siento que la gente piensa que todas las fotos son para subir a instagram y eso un poco me angustia.
Luis en una parte de su respuesta acerca del título escribe que entendernos como seres mixtes de piel, de sangre y de inspiración nos permite identificarnos como mixtes de género. Quiere que desde la mixtura nos preguntemos de qué forma nuestro género es Mestizx.
En ese sentido me parece muy lógico que en la revista -de una forma editorial- dialoguen todas las imágenes de todxs lxs artistas sin importar quién sacó cada foto, la idea de lo colectivo.
Te adoro
M: Hola hermosa, qué lindo recibir este mail.
El Flasherito es alto diario, lo sigo. ¡Me entusiasma que haya una nota sobre fotografía! Nuestra amada fotografía.
¡Te leo y suspiro de alivio! El alivio de saber que una encontró compañía.
Lo primero que viene a mí es una pregunta: ¿Por qué insistir en la fotografía? ¿Por qué aún la fotografía?.
Me la hago a mí, te la hago vos. Me la hago mientras pienso en la revista.
A mí me parece que es muy fuerte ese vínculo entre fotografía y documento. El problema aparece cuando lo fotográfico se agota ahí, como si esa fuese la única potencia de fotografiar. Tampoco me parece negar esa relación, existe, está ahí pero así como decís vos, creo que parte de nuestra tarea como fotógrafas es alejarnos de esa idea.
Trabajar quizá por una fotografía que esté menos vinculada al pasado y más cercana a lo propositivo, a lo que todavía no existe, a lo que podemos inventar juntas. La fotografía como una práctica que nos permite estar alertas, estar abiertas a lo que pase. Pienso que la revista trae algo de esa intención, nuevas formas de mirar y de estar en el mundo. Me gusta la propuesta de poner a convivir archivos fotográficos con fotografía contemporánea. Me imagino por ejemplo las fotos de Foto Estudio Luisita y las fotos de Julia Sbiller y Joaquin Wall.
J: ¿Por qué insistir en la fotografía? ¡Qué pregunta!
Vos sabés que a mí me encantan las preguntas y no suelo buscarles una respuesta. Solamente tengo la certeza de que sirve, de que funciona, de que registra y ayuda a la memoria, a los recuerdos. También crea ficciones, es lindo eso ¿no?. Estoy releyendo Sobre la Fotografía de Susan Sontag y el otro día reescribí esta cita en mi cuaderno “Poseer el mundo en forma de imágenes es, precisamente, volver a vivir la irrealidad y lejanía de lo real.”
M: Yo tampoco tengo una respuesta, tengo aproximaciones. Sí siento como vos, que la foto me ayuda, me expande. Creo que es mi forma de estar en el mundo. Me encanta ese doble juego que planteas; registrar y crear. Creo que ahí está el valor, lo diferencial de fotografiar.
Hermosa Sontag… Te propongo eso ¡Vivir la irrealidad con nuestras fotos!
Me gustó eso que dijiste de las preguntas, me parece que quizás fotografiar sea permitirnos esa apertura. Pienso en esa pregunta que escribiste sobre tus fotos: ¿Qué pasa cuando nos miramos?
J: Es algo que todavía estoy descifrando. Creo que el autorretrato es un método de autoconocimiento y que, cualquier persona que se replantee su identidad y el sentido de su vida debería autorretratarse alguna vez.
Me pasa mucho que me encuentro autorretratandome con los ojos cerrados, como si no quisiese afrontar el momento de la toma con la mirada, o como si estuviese tan en confianza que puedo no ver y sé que todo va a estar bien cuando sea el momento de apretar el obturador. También creo que detrás de esas fotos hay un deseo por estar con los ojos cerrados y perder un poco el control.
¡Me llegó la revista! Viéndola me di cuenta de que me gustaría autorretratarme como Diego Nuñez en la página 131: mirada desafiante, luz natural desde la izquierda del cuadro y medias de red.
¿Con qué autorretrato te presentarías? ¿Lo pensaste alguna vez? Yo lo pienso mucho y no puedo decidirme nunca.
M: Mis autorretratos son con ojos cerrados o fuera de foco. Siempre pienso en eso, en cómo me cuesta el vínculo conmigo misma. Se nota en las fotos que me saco, la fotografía es lo más buchona que hay.
No sé, nunca pienso con qué autorretrato me presentaría. Siento que tendría que ser uno donde se me vea bien la cara, y el pelo. El pelo es importante. Ahora quiero ojos abiertos mirando a cámara y foco perfecto punto por punto. Los tuyos me encantan. ¿Una foto de la sombra de tu mano con luz de atardecer es un autorretrato?.
A mí también me llegó! Lo primero que me llamó la atención fue la propuesta editorial de generar cruces entre distintxs fotógrafxs, eso que Luis nombra como mestizaje. Hay algo en esa decisión que está un poco en sintonía con pensar la fotografía como una posibilidad para encontrarse con otrxs y que ese encuentro tenga como valor la diferencia, que lo distinto sea aquello que nos une. Mi amiga Iara me dijo una vez que la amistad es una alianza entre distintxs.
J: ¡Qué hermoso! Creo que resume muchas cosas que pensamos y vivimos día a día. Ver las diferencias como complementos, asombrarse todo el tiempo. ¿Viste que las ediciones anteriores de Balam eran de estilo catálogo? Incluía pocxs autorxs, todo muy ordenado. Esta edición decidieron salir de esa modalidad mezclando fotografías de más de cien autorxs de muchos países distintos, enfocándose en lo visual y formando un gran archivo con imágenes que forme un todo Mestizx. Además, ¡En este número son dos editores! Verónica Fieiras también participó de la selección y el armado de la revista.
Mi amigo Ariel Guissari, que está publicado en la revista con un trabajo de coautoría con Gisela Volá, una vez posteó algo en su instagram que decía algo así como «la visibilización también somos nosotrxs existiendo«. Hay una relación muy fuerte entre la “visibilización” y la fotografía, como si esa fuese la única tarea al hacer fotos. Creo que la revista propone ir más allá, te invita a conocer el laburo de todxs lxs artistas con mayor profundidad.
M: Existir con una y con otrxs, me parece que hay algo de la revista que va por ese lado. Ver todas esas fotos juntas me hace pensar en una fiesta donde todxs estamos bailando y nos componemos lxs unxs con lxs otrxs, un montón de cuerpos entrelazados. Pienso en esta revista como una forma de celebrar esos encuentros y lo híbrido de entrecruzarse.
Te leo, aprendo.
J: Otra cosa que me gustaría charlar con vos es sobre la relación entre el texto y las imágenes. En la revista primero te proponen el recorrido visual y que los textos están al final, me gusta eso.
Para Mestizx, además de Johan Mijail (escritora y artista performance de origen dominicano que escribe desde 2015 para la revista) también invitaron a Rocío Inmensidades para que escriba junto a Bbywacha y Florá Nomada del Colectivo Identidad Marrón. En el último texto nos proponen reflexionar sobre la producción y cómo queremos habitar los espacios dentro del arte, hacen preguntas como ¿Cuál es la capacidad del arte?; ¿Podemos pensar en matices?; ¿Qué arte humaniza?; ¿Puede el arte ser horizontal?.
M: ¡Sí! Creo que es importante trabajar esa relación. Confío en quienes escribieron este número. Creo que el texto muchas veces puede quedarse en un tono más explicativo o defensivo, me gusta pensar en un texto que expanda las fotos, que las acompañe y no que las sobre explique. Que las deje ser como son ¿No?.
Hay algo que dice Luis en la entrevista que me gustó y tiene que ver con el tiempo que lleva hacer una revista. Resalta que el proceso le permitió generar un compromiso con aquellos contextos desiguales y minoritarios, Luis dice en la entrevista que es importante mostrar y visibilizar las existencias de nuestras identidades y realidades ya que como minorías somos invisibilizadxs, rechazadxs, discriminadxs e incluso exotizadxs para el consumo de los cis. En ese sentido, pienso en la pausa como algo necesario para la escucha, para dar lugar a voces que hablan más bajito. Lo relaciono también con ignorar la presión externa del todo ya.
Creo que la decisión de hacer una revista impresa tiene que ver con volver a cierta velocidad, a ciertos tiempos limitados por la impresión, por el papel, por la materia. Me entusiasma eso, lo lento, lo cuidado, lo pequeño y lo posible como respuesta a la hipervelocidad e hiperproductividad.
¿Por qué imprimir una revista en la era digital? ¿Qué tiene el papel que no tiene la pantalla? ¿Cuál es la importancia de la revista como objeto? ¿Cuál es la importancia de tocar y de tocarnos?
J: También me entusiasma la idea de lo lento, la idea de tocar una fotografía, el tacto, el papel, el peso de una revista, no se por qué. De lo único de lo que estoy segura es que la foto no es solamente para verla, de una foto pueden salir olores, sensaciones. Qué lindo tocar una foto, olerla, cortarla, pegarla con otras, crear nuevas imágenes y así seguir cruzandonos, seguir colectivizando las fotos. ¿La única forma de ver de a muchxs es mezclarse? ¿Cómo mirar juntxs? Mar, quiero que miremos juntas.
Lo único que puedo decir con certeza es que la fotografía, nuestra amada fotografía, ayuda y que cualquiera puede hacer una foto.
Registremos la irrealidad de nuestras vidas, los momentos que nos sorprenden y nunca habíamos imaginado. Hagamos que dialoguen con los momentos de otrxs y que nuestras bibliotecas se llenen de diálogos, de publicaciones colectivas.
Mi amiga Cami una vez me escribió «¿cómo decirte que tu foto es un te quiero?». ¿Tus fotos también son declaraciones de amor? ….